
Es tan corta la distancia que realmente nos separa.
Es tan corta como extender la mano,
para encontrame aqui a tu lado
observandote en silencio
y deseando que en algún momento
te des la vuelta y me vulevas a mirar.
Es tan corta la distancia,
pero tan grande el orgullo.
Que tan solo permite que mirandonos con disimulo, como aparentando que no estas,
nos preguntemos inquietados,
si tu corazón y el mio al unisono,
gritan un " te extraño"... un te extraño que jamás se escuchará.
Tan solo un paso tomaría,
para terminar esta agonía.
Para dejar de lado este juego macabro,
en el que aposté el corazón por querer estar a tu lado
y que inevitablemente y con mi mala suerte perdí.
Y es que puedo sentirte respirarme cerca,
puedo ver en tu mirada
que en el fondo mi presencia aun te inquieta
y se que aunque no quieras
y aunque el orgullo no permite
en el fondo de tu ser quisieras saber como estoy.
Es tan corta la distancia,
pero tan inmensa la apatia.
Llevando a que inevitablemente,
en tu vida y en la mia,
se cree un vacio lleno con porquerias.
Con un amor mal llamado amor,
con un orgullo inmenso
y una humildad ausente.
Es tan corta la distancia,
que sin decir nada entiendo,
que por tu temor y mi cobardía,
murió en mi corazón el amor que te tenía,
dejando tu recuerdo en la lejanía,
y una distancia impuesta,
que a pesar de ser tan pequeña
entre los dos se hace inmensa,
a pesar de estar tan cerca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario